Adéntrese en un cuento de hadas - Descubra los castillos más bellos de Portugal

La encantadora ciudad amurallada de Óbidos alberga uno de los castillos mejor conservados de Portugal. Pasee por las antiguas murallas, explore las calles empedradas y sienta la magia medieval a su alrededor. Este pueblo perfecto es uno de los favoritos de los amantes de la historia, los fotógrafos y cualquiera que sueñe con retroceder al tiempo.

Encaramado sobre el valle del río Tajo, el Castillo de Santarém ofrece una de las vistas panorámicas más impresionantes del centro de Portugal, y un viaje al pasado medieval del país.
Santarém fue una de las ciudades favoritas de Afonso Henriques, fundador de Portugal, y en su día fue un bastión clave en la defensa del reino portugués. El castillo, con su posición elevada y sus fuertes murallas, desempeñó un papel crucial durante la Reconquista cristiana y sirvió como estratégica residencia militar y real a lo largo de los siglos.

Situado en una pequeña isla en medio del río Tajo, el castillo de Almourol es una de las fortalezas más singulares y fotogénicas de Portugal. Accesible en barco, esta fortaleza medieval ofrece una experiencia tranquila y mágica lejos de las multitudes. Es un tesoro escondido que parece sacado de un libro de cuentos.

Descubra los misterios del Castillo de Tomar - El legado de los templarios.
Adéntrese en el corazón de la historia portuguesa con una visita al magnífico Castillo de Tomar, uno de los monumentos más fascinantes y simbólicos del país. Con vistas a la ciudad de Tomar y rodeada de una vegetación exuberante, esta fortaleza del siglo XII fue en su día la sede de la legendaria Orden de los Templarios en Portugal.

Castillo de Palmela - Donde la historia se une a unas vistas impresionantes
Erguido con orgullo sobre los viñedos de la región de Setúbal, el Castillo de Palmela le invita a explorar siglos de historia portuguesa en un entorno verdaderamente inolvidable. Con su ubicación estratégica en lo alto de una colina, el castillo ofrece vistas panorámicas de la Serra da Arrábida, el Océano Atlántico e incluso Lisboa en un día despejado - una mezcla perfecta de cultura y belleza natural.
Originalmente una fortaleza árabe, el castillo de Palmela fue conquistado por el primer rey de Portugal, Afonso Henriques, en el siglo XII. Pronto se convirtió en la sede de la poderosa Orden de Santiago, que amplió y reforzó la estructura, transformándola en un gran complejo militar y religioso.

Castillo de Sesimbra - Historia con vistas al mar
Enclavado en lo alto de una colina con vistas al pintoresco pueblo pesquero de Sesimbra y al centelleante océano Atlántico, el castillo de Sesimbra es una de las fortalezas más pintorescas e históricas de Portugal. Con sus vistas impresionantes y sus murallas centenarias, una visita a este castillo es como un viaje a la época medieval.
Desde lo alto, las vistas panorámicas son realmente inolvidables: sobre la ciudad, el puerto pesquero, la Sierra de Arrábida y el infinito azul del Atlántico. Es el lugar perfecto para tomar fantásticas fotografías, pasear tranquilamente y reflexionar en silencio.